EL CUENTO DEL PISHTACO

EL CUENTO DEL PISHTACO

Julián era un joven pastor pero era muy distraído, un día producto de su falta de atención se le perdieron 2 ovejas su madre en forma de castigo le sirvió la sopa sin presa y esto le puso triste a Julián ya que a él le  gustaba mucho la sopa hecha con charqui. Un día mientras Julián pasteaba sus ovejas por los pastizales  avisto hacia lo lejos a un hombre que se alejaba presurosamente llevando un saco en los hombros, Julián asustado pensando que este hombre le había robado uno de sus animales empezó a contar sus ovejas pero estas estaban completas no se había extraviado ninguno, pero él pensaba que llevaba este hombre en el saco.

Pasaron los días pero Julián  siempre divisaba a lo lejos para ver si volvía a ver al hombre misterioso y un día menos pensado Julián volvió a ver a lo lejos al misterioso hombre, Julián intrigado quiso saber que hacia ese hombre por esos lares ya que era un lugar muy alejado sin pensarlo dos veces Julián siguió a lo lejos al misterioso hombre abandonando sus ovejas a lo lejos Julián vio como el hombre se metía a una pequeña choza ya era de noche y Julián tenia frio es cuando entonces decidió tocar la puerta de la choza y pedirle alojamiento al misterioso hombre cuando Julián toca la puerta se escucha una voz que le dice adelante te he estado observando desde lo lejos y esperaba a que te animes a entrar a mi casa, Julián asustado entro al interior de la choza al ingresar su olfato sintió un delicioso aroma el cual le abrió el apetito, el misterioso hombre que resulto siendo un anciano le pregunto que si tenía hambre Julián le respondió inmediatamente diciéndole que sí, el anciano agarro un pequeño palto y le sirvió una pequeña porción de chicharon acompañado de cancha y un suculento ají ,cuando Julián probo la carne en su mente decía que era el mejor chicharrón que había probado tanto así que pidió otro plato el anciano le ofreció una cama a Julián para que se quede a dormir a lo cual Julián respondió con un sí, sin importarle la suerte de sus animales cuando Julián despertó al día siguiente se dio con la sorpresa de que el anciano no estaba ya en la choza pero dejo su ollita el por curioso y pensando de que podría haber más chicharrón levanto la tapa de la olla y vio la mano de una persona muy asustado salió de la choza corriendo como alma que lleva el diablo no paro hasta llegar a su casa su madre al ver que Julián había llegado a su casa pálido y sin poder hablar le dio de tomar abundante agua espero que se calmara su hijo para que le cuento lo sucedido una vez calmado Julián le empezó contar a su madre lo sucedido su mama alarmada fue al pueblo para contarle a sus vecino lo que a su hijo le había pasado, los vecinos algunos incrédulos y otros alarmados decidieron ir junto a Julián a la choza del anciano  llegando a la choza ya en el interior encontraron la olla y el saco del anciano con mucho temor vaciaron lo que el saco tenía en su interior  grande fue su sorpresa cuando encontraron la mano de una persona las personas espantadas por lo sucedido prendieron fuego a la choza y destruyeron el lugar ,algunos pobladores dicen que el anciano era un pishtaco que acostumbraba matar a sus víctimas y comérselos por suerte Julián no fue una de sus victimas